TU PODER INTERIOR: No es algo que tengas que aprender, simplemente recordar.

(Fuente Imagen: Flicr /Moyan Brenn)

Deja de lamentarte del pasado, lo mejor está en el presente, cuando eres dueño de tu pensar y sentir te vuelves dueño de tu poder, tu energía es la forma de conexión que tienes con tu entorno, mientras más la enfoques, más claridad tendrás en tus proyectos, deseos y acciones.

La conciencia de muchos está siendo cada vez más atenta a lo que pasa pero desde una postura ajena, como si no fueran parte del todo, esa en definitiva es una zona de confort, pues no es lo mismo percibir las cosas desde una aparente seguridad a saber que eres también parte del proceso, aun siendo espectador.

Mis palabras van intencionadas a despertar en ti la consciencia que eres dueño de ti mismo y tus decisiones, tú tienes todas las herramientas que necesitas para conectarte a esa fuente de información que requieres desde una consciencia superior, más el primer paso es poner la intención de hacerlo, para algunas personas es muy fácil hacer a los demás responsables de todo lo malo que pasa en su vida: me hizo, me dijo, me dio, me quitó…, pero ¿qué hay del momento en que elegiste entregarle ese poder que te caracteriza dando importancia a las opiniones ajenas? ¿En qué momento dejaste de poner atención a tus pensamientos y sentimientos?

Si estas palabras vibraron dentro de ti, entonces es momento de abrirte a percibir la vida de otra forma, siendo consciente de lo que pasa en ti; haz actividades que te permitan reconectar tu conciencia física, el simple hecho de caminar notando como se mueve cada parte de tu cuerpo, cambia la percepción, puedes hacer otras actividades como yoga, natación, meditación, actividades artísticas, cocinar, etc, pero en lugar de permitir que tu mente vuele a revisar pendientes, crear historias, componer el mundo, simplemente enfócate en cada movimiento y sentimiento que tengas, sin juzgar ni forzar, sólo observa; poco a poco te darás cuenta de todo lo que pasa en ti que no habías puesto atención antes y si eres constante, no sólo llegarás al plano físico, sino también emocional y así te irás conectando cada vez más contigo mismo. No es algo que tengas que aprender, simplemente recordar.