Elena

Elena

domingo, 28 de octubre de 2012

Tu eres Yo

Han conocido alguna vez  a alguien que sientes que ya le conocían de tiempo atrás aunque sea la primera vez que le has visto en tu vida?
Es una sensación muy agradable cuando encuentras punto de coincidencia con los demás, es muy fácil convivir y compartir experiencias; pero ¿qué pasa cuando conoces a alguien y simplemente no hay punto de afinidad?

Hay un princpio en el Kybalión que dice:

"Polaridad: Todo es dual, todo tiene polos, todo tiene su par opuesto, igual y diferente son lo mismo; los opuestos son idénticos por naturaleza, pero en diferente grado; los extremos se encuentran; todas las verdades son medias verdades; todas las paradojas pueden reconciliarse"

Otra frase muy famosa en los dichos populares que también explica un poco este prinpio es:

"Lo que te choca, te checa"

Seguramente más de uno al leer las líneas anteriores sintió escalofríos de tan sólo considerar la idea de que ese personaje que simplemente no soportamos termine siendo igual a mi... Si lo analizamos desde un punto de vista desapegado y objetivo, quizás sea porque todo tiene un equilibrio divino y perfecto, no hay día sin noche, energía femenina-masculina, positivo-negativo, ying-yang.

De hecho este prinpio nos invita a considerar que cuando nos encontremos en alguna situación desfavorable, negativa, dolorosa, siempre consideremos que también existe su contrario y es lo que debemos de programarnos para recibir, así el cambio se hará más fluído y fácil.

Lo importante no es vivir en el idealismo pretendiendo que todo está bien siempre, sino con los pies en la tierra, tener en cuenta que sólo el cambio es constante y por ende no todo el sufimiento, ni la ansiedad, ni el estrés, ni la tristeza, ni las penas son para siempre. Cuando te enganchas a eso que no te gusta, simplemente lo atraes más a ti, es como si pidieras que todas esas situaciones, cosas y personas desagradables te sigan en tu vida; es así que debemos estar conscientes de nuestra capacidad creadora y de manifestar nuestra realidad, pero como he mencionado en una nota anterior, la conciencia del presente, es lo que nos permitirá poder hacer uso de la creatividad.

Entonces, si todo tiene su equilibrio y contraparte, entonces no suena tan extraño que existan personas que simplemente no toleremos porque las consideramos diferentes a nosotros en algún sentido. Al despertar esta conciencia, es más fácil poder sobrellevar a ese personaje que posiblemente le sea muy fácil sacarnos de nuestro centro e inclusive despertar cierta incomodidad.

Recuerda, tu eres yo y yo soy tu y lo único real es el cambio.

Sat Nam

 

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